Las narrativas de la memoria serán el eje central del dossier que editará Hacemos Memoria en la próxima edición de la revista Textos y contextos de la Facultad de Comunicación Social (FACSO) de la Universidad Central del Ecuador (UCE). Para tal fin, está abierta la convocatoria a presentar artículos académicos hasta el 30 de enero de 2023.
La falta de recursos no solo afecta al Museo Casa de la Memoria de Medellín. Otros lugares de memoria en el país atraviesan crisis similares. Desfinanciación, falta de apoyo institucional y pérdidas de liderazgos son algunos de los problemas.
En esta población del Oriente antioqueño los integrantes de Hacemos Memoria proyectaron la multimedia Liberto: un nombre desaparecido en combate y junto a víctimas, líderes, campesinos y funcionarios públicos reflexionaron acerca de la desaparición de personas en medio del conflicto armado.
En la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Antioquia hay un seminario virtual que conmemora la vida y obra de este médico y defensor de derechos humanos que fue víctima de la violencia política en la década de los ochenta.
Este grupo paramilitar se caracterizó por proteger las economías de la coca y la minería, pero también por exterminar a las organizaciones y movimientos que se oponían a los partidos tradicionales y por ejercer la violencia sexual contra las mujeres como una acción de guerra.
La mente no es la única depositaria de la memoria, el cuerpo es su receptor primario y la danza su decodificación artística. Así lo explica Rafael Palacio, coreógrafo de profesión, al referir la importancia del movimiento como expresión cultural en Develaciones.
En la vereda San Lorenzo del municipio de Alejandría, una de las más apartadas y afectadas por el conflicto armado, el profesor Juan Carlos Álvarez lidera un proyecto de memoria con estudiantes de primaria.
Cuatro mujeres del colectivo Madres de la Candelaria abrieron su corazón para contar episodios de sus vidas que reflejan coraje y valor, cualidades que, aseguran ellas, solo la muerte les quitará.
En las calles de este barrio de Medellín hay tres galerías de arte urbano al aire libre. Las imágenes guardan las memorias de lucha y resistencia de quienes han construido y habitado este lugar.
La llegada del narcotráfico a Medellín sembró muerte, violencia y también historias de amor. Eduardo y Piedad se vieron involucrados en esa espiral de dinero, lujos y locura, hasta el punto de casarse en una cárcel.