Con la recopilación de cerca de doscientas fotografías, en Cocorná está tomando forma el Salón de la Memoria. Esta iniciativa ciudadana pretende reflexionar sobre los hechos violentos ocurridos durante el conflicto armado y rendir homenaje a las víctimas de este municipio del Oriente antioqueño. 

Por Fabián Uribe Betancur
Foto: Alex Quintero

Entre el olor a pintura fresca, las paredes recién pintadas, el polvo y el ruido provocado por las adecuaciones, el 14 de diciembre de 2023, el Salón de la Memoria de Cocorná fue entregado a la comunidad de manera simbólica, si bien aún no está abierto al público. Este espacio busca reflexionar sobre cómo el conflicto armado ha marcado la vida de los habitantes de este municipio del Oriente antioqueño, una de las regiones más afectadas por la violencia.  

Esta iniciativa fue impulsada por la Mesa de Víctimas, con el respaldo de la Alcaldía, que cedió el espacio, un salón en la Casa de la Cultura, a través de la figura de comodato, por cinco años. La entrega simbólica del Salón ocurrió en los últimos días de la administración de Saúl Alberto Giraldo Gómez, quien le entregó el cargo de alcalde a David Gómez. El proyecto fue financiado por la organización no gubernamental Confraternidad Carcelaria de Colombia, CCC, y contó con el acompañamiento de la Personería Municipal. 

Para Marta Luz Carvajal, integrante de la Mesa de Víctimas de Cocorná, este espacio pretende recoger las memorias e historias vividas por la población durante el conflicto armado. “Aprender sobre estos sucesos y recordarlos sin que nos cause dolor, y de esta manera evitar que vuelvan a repetirse”, resalta. 

El Salón de la Memoria se encuentra en el sótano de la Casa de la Cultura y alberga cerca de 200 fotografías que narran las tradiciones y épocas de violencia del municipio, distribuidas en tres temáticas: Cocorná antiguo, en conflicto y en posconflicto. Allí también se conservan y exhiben otros elementos de carácter más simbólico, como un libro que fue atravesado por un proyectil, así como una escultura que representa la toma del municipio por parte de las FARC el 30 de noviembre de 1998, uno de los hechos más recordados por la población cocornense. 

La obra El sacrificado de la intolerancia forma parte del registro histórico seleccionado para narrar la época de violencia en el municipio. Foto: Alex Quintero.

Carvajal agrega que para la recolección y selección de las fotografías contaron con el acompañamiento y la participación de integrantes de la CCC, la Personería Municipal y la Mesa de Víctimas de Cocorná. “Durante los encuentros psicosociales que han proporcionado estas organizaciones a las víctimas, se les ofrecía un espacio para compartir sus historias, anécdotas vividas y hechos victimizantes. En esos momentos, algunos expresaban: ‘Yo tengo fotos en tal lugar y sé dónde las puedo encontrar’”. 

Otra de las obras representativas del Salón de la Memoria de Cocorná es la escultura del líder cultural Hectalibar Toro Quintero, titulada El sacrificado de la intolerancia, un cristo elaborado con partes retorcidas de instrumentos musicales que quedaron tras la toma guerrillera de 1998, donde resultaron destruidas la Casa de la Cultura y la Escuela de Música. 

Al respecto Alex Quintero, pintor y muralista cocornense, quien fue la persona encargada de diseñar la disposición de los elementos dentro del salón, explica: “La escultura tiene una representación simbólica hermosa y representativa de aquella época de violencia. Refleja cómo nuestra cultura fue golpeada y sacrificada en medio de la intolerancia que se vivía en Cocorná en ese momento”. 

Para el director de la Casa de la Cultura, Héctor Mauricio Castaño, este ejercicio de memoria es significativo, permite recordar y reflexionar sobre la época de violencia. “Queremos continuar respaldando esta iniciativa para que las personas conozcan este lugar, y estamos trabajando en ello. Este espacio debe ser intervenido debido a las humedades causadas por su ubicación en el sótano de la Casa de la Cultura. Pero solucionando esa situación queremos que esté más disponible al público”. 

En la actualidad, el salón se encuentra en un proceso de adecuación que abarca la recolección y selección de otros registros fotográficos, la organización de las temáticas y la consideración de un posible mantenimiento de la planta física. Esto se debe a que en el lugar se han detectado problemas de humedad que ponen en riesgo la integridad de los archivos. 

Este espacio de memoria también incluye hechos simbólicos, como la fotografía de un contador de energía atravesado por un proyectil. Foto: Alex Quintero.

“El salón no ha sido promovido mucho porque estamos organizando detalles, como la selección de una comitiva para que estén presentes en el sitio, establecer horarios y funcionamiento al público. Además, el director de la Casa de la Cultura nos dijo que van a solucionar el problema de las humedades, porque en la última reunión que tuvimos, retiramos algunas fotografías debido a que la madera estaba podrida” señala Carvajal, integrante de la Mesa de Víctimas. 

Según Castaño, desde la Casa de la Cultura se tiene pensado crear una estrategia de divulgación y promoción del sitio para que las personas vayan a conocerlo. “Estamos buscando articularnos con la Mesa de Víctimas y respetar su proceso de plan de acción, con el objetivo de colaborar en la creación de nuevas iniciativas. Esto facilitará la apropiación por parte de la comunidad e integraremos estas propuestas en nuestro plan de desarrollo”. 

Carvajal también menciona que desde la Mesa de Víctimas de Cocorná se está iniciando el proceso de la creación de plan de acción para este año, para lograr la articulación con las demás entidades del municipio y buscar apoyos para el fortalecimiento, sostenimiento, promoción y divulgación del Salón de la Memoria. “Queremos contar con un salón bien establecido y estructurado para llevar a cabo la inauguración y abrir las puertas al público”.