La difícil tarea de buscar a las personas dadas por desaparecidas en el país, y la esperanza del reencuentro, está plasmada en el documental Por cielo y tierra, realizado por la UBPD y RTVC. Si bien aún no está disponible en plataformas digitales, después de su estreno nacional el 9 de abril, continúa proyectándose en universidades, festivales, espacios culturales y comunitarios en barrios, veredas, pueblos y ciudades de Colombia. 

Por Fabián Uribe Betancur 
Fotos: UBPD

En 68 minutos, el documental Por cielo y tierra narra cómo es la búsqueda de las personas dadas por desaparecidas en Colombia, a través de las historias de Omaira, una excombatiente que buscó a su padre desde el 2017 hasta encontrarlo; Daniela, una mujer indígena que por 20 años buscó el cuerpo de su papá; Gladys, una madre que sigue buscando a su hijo desaparecido en el 2002; y Herminia, otra madre que, por fin, luego de años de espera, pudo recibir y darle un entierro digno a su hijo. 

Junto a estas historias de vida y búsqueda, el documental cuenta cómo nace la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, UBPD, tras la firma del Acuerdo de Paz en el 2016 entre el Estado colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP). Fruto de lo pactado en La Habana, la UBPD surge como exigencia de las víctimas del conflicto armado, quienes insistieron a lo largo de los diálogos en que los “desaparecidos nos faltan a todos”, por lo que se hacía necesaria una entidad que se encargara de la búsqueda, acompañando a las familias, estableciendo planes concretos en todas las regiones del país, articulándose con otras instituciones judiciales y motivando a la sociedad para consolidar información que lleve a los reencuentros con el ser querido del que un día no se supo más.  

Para Luz Janeth Forero, directora de la UBPD, la desaparición es un flagelo aberrante y doloroso que debe acabar. “En Colombia no hay un solo municipio que no lo padezca. Por ello, queremos que el documental Por cielo y tierra sume a nuestra gestión de búsqueda y llegue a todos los rincones para que, en el país, se conozca más la realidad de esta problemática, se sumen esfuerzos en la búsqueda y se alivie el sufrimiento de miles de personas y familias buscadoras”, dijo durante el estreno en Bogotá. 

Hasta el momento la UBPD ha realizado 19 reencuentros, esto es hallazgos con vida de personas que estaban desaparecidas y establecimiento de contacto con sus familias. Así mismo, su labor ha permitido la recuperación de 1337 cuerpos y la entrega digna de 259 restos de personas plenamente identificadas a sus seres queridos. Estas cifras aparecen en el documental como una muestra de esperanza para quienes continúan buscando a sus familiares.  

En ese sentido, de acuerdo con Forero, el documental “es una herramienta de sensibilización y pedagogía que narra la complejidad de la búsqueda de más de 105 000 personas dadas por desaparecidas en el conflicto armado en Colombia”.  

Por su parte, Gloria María Araque, coordinadora de la UBPD en Antioquia, enfatiza en que, más allá de ser una estrategia pedagógica, es un reconocimiento a aquellas personas que siguen buscando a sus familiares: “Es un llamado a la solidaridad con las miles de familias que hoy en día están buscando a sus seres queridos desaparecidos. También es un reconocimiento a la valentía de esas familias que por años los buscaron solas”. 

Agrega Araque que la UBPD está llevando a cabo una estrategia de acercamiento con diferentes entidades y organizaciones sociales en las subregiones de Antioquia, con el propósito de sumar apoyos en la búsqueda de personas dadas por desaparecidas. “En muchos municipios de Antioquia ya hemos contado con la vinculación de las alcaldías y de las organizaciones que puedan tener información como las registradurías, las notarías, los hospitales, las iglesias y las comunidades. Esta estrategia del documental viene a reforzar todo el acercamiento que tenemos en los territorios y de esta manera ganar aliados en la búsqueda”, dice la coordinadora regional.   

Durante el estreno del documental en el Teatro de Comfama de Medellín el 9 de abril, se congregaron diversos colectivos de víctimas y organizaciones de derechos humanos. Tras la proyección, los asistentes compartieron sus impresiones y reflexiones al respecto. Algunos de los presentes expresaron su interés en difundirlo en sus territorios y comunidades, reconociendo así la importancia de este para sensibilizar y educar sobre la búsqueda de personas dadas por desaparecidas. 

Luz Amparo Mejía, representante legal de las Madres de la Candelaria – Línea Fundadora, comentó: “Para mí, como mujer buscadora y víctima del conflicto armado, y miembro de una organización, el documental es fundamental porque comienza a dignificar la búsqueda y la entrega. Este nos muestra cómo hoy en día estamos respetando las creencias, las culturas y las formas que tenemos las personas para darles el último adiós a nuestros seres queridos”.  

Por cielo y tierra es una producción documental de la UBPD y RTVC Sistema de Medios Públicos. El estreno nacional se llevó a cabo por televisión pública el 9 de abril, en conmemoración del Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas. 

Si bien aún no está disponible en plataformas digitales, continúa proyectándose en universidades, festivales, espacios culturales y comunitarios en distintas ciudades de Colombia y en el exterior.  

Por ejemplo, Luz Amparo Mejía dice que las Madres de la Candelaria – Línea Fundadora seguirán compartiendo la producción audiovisual entre sus comunidades y grupos de interés, para dignificar la situación de las víctimas y facilitar diálogos sobre los hechos violentos del conflicto. “El viernes 3 de mayo, con el acompañamiento de la MAPP OEA y la Unidad de Búsqueda, vamos a proyectar el documental en la comuna 6 de Medellín con un grupo de víctimas. Esto será de mucha utilidad para los procesos pedagógicos que desarrollamos en los territorios”, finaliza Mejía. 

Al proyectar el documental como estrategia pedagógica en barrios, universidades, consejos comunitarios, resguardos y pueblos, se espera que aumente el número de solicitudes de búsqueda que llegan a la UBPD, que hasta el momento son cerca de 26 000. 

Algunas protagonistas de documental  

Esta obra audiovisual honra a las más de 111 000 personas desaparecidas, según cifras oficiales de la UBPD: así como a aquellos que las buscan y a los equipos profesionales que trabajan en labores humanitarias y extrajudiciales. Dos de sus protagonistas son Herminia Jiménez Quiñones y Daniela Andrea Mostacilla. 

Herminia Jiménez Quiñones 

A sus 59 años, Herminia es madre de 10 hijos e hijas, entre ellos Rodrigo Fernando Jiménez, quien desapareció el 7 de julio del 2012. La UBPD logró recuperar su cuerpo y entregarlo a su familia en noviembre del 2023. 

Herminia se caracteriza por ser una mujer luchadora, trabajadora, de gran tenacidad. Durante más de una década, ha estado apoyando a niños y niñas de su comunidad, La Brava, en Tumaco, Nariño, como catequista. Junto a dos vecinas y con la parroquia de Espriella, estableció la asociación Luz de Esperanza, con el propósito de buscar a sus seres queridos desaparecidos. 

Daniela Andrea Mostacilla 

Daniela es miembro del pueblo Nasa y reside en el resguardo San Lorenzo de Caldono, Cauca, un territorio ancestral conocido como Sat Thama Kiwe. Es una hija buscadora que ha dedicado gran parte de su vida a luchar por dignificar la memoria de su padre. 

Se autodefine como una mujer rebelde y desafiante. Profesional en matemáticas y con vocación de docente universitaria, se dedica también al activismo, trabajando incansablemente para proteger a la niñez de su resguardo del reclutamiento forzado. Además, brinda apoyo a madres e hijas en su búsqueda de los desaparecidos.