En su ensayo sobre los abusos de la memoria, Todorov reivindica el uso de la memoria ejemplar, que siempre he comprendido como un llamado a compartir nuestras memorias, a vernos en el espejo de la memoria de otros para reconocernos y aprender de nuestro pasado para afrontar el presente. Vivimos en un presente violento que nos demanda reacción, si es que pensamos que el mal pasado nos ampara del peor futuro.
El coronel de García Márquez siempre espera el telegrama de su pensión lleno de expectativa y frustración; lo mismo viven en Colombia las víctimas del conflicto armado que buscan una indemnización. ¿Por qué se demora tanto la reparación?
Desconcierta que algunos directivos de la administración universitaria hayan decidido borrar el mural del cirirí creado hace menos de un mes por estudiantes universitarios. Si crearlo fue un acto profundamente político, borrarlo también lo fue. Hacerlo desaparecer puede leerse, en el contexto universitario, como una estrategia de silenciamiento.
Es innegable que hoy son noticia los migrantes de Medio Oriente al igual que los de Centro y Sur América, entre estos últimos los de Venezuela en el norte de Chile, los imparables de Tapachula o los varados en la ciudad colombiana de Necoclí en su éxodo hacia Estados Unidos.
¿Qué pasa cuando uno narra su propia historia y construye una disposición simbólica de ella? ¿Qué pasa cuando las propias víctimas del conflicto armado disponen de sus testimonios para crear sus propias obras de arte, en especial, de teatro? Una reflexión sobre las obras escénicas creadas por víctimas.
En abril del 2021 circuló en el Catatumbo, Norte de Santander, la segunda edición del periódico Pacificultor que abrió sus páginas con la editorial que compartimos a continuación, escrita por el sacerdote Jairo Gelvez Tarazona, párroco de la región.
De las informaciones que algunos medios producen sobre el Paro Nacional en Colombia pueden extraerse varios errores que se cometieron en el cubrimiento del conflicto armado. Recuperar esos aprendizajes y ponerlos en práctica hacen que valga la pena hacer memoria.
En la conmemoración del Día Internacional por los Derechos de las Mujeres, resalto el trabajo de las mujeres víctimas del conflicto armado, quienes con sus luchas expresadas a través de la acción colectiva, innovadora y transgresiva, han aportado a la reconstrucción de una sociedad destruida por la guerra.
Las sociedades de hoy padecen de un momento punitivo en el que el castigo, que se ofrece como solución a la delincuencia, es un grave problema. Una multitud que se lanza enfurecida a amputar la mano de un joven acusado de hurto es una triste muestra.
En abril de 1971, enfrentamientos entre estudiantes de la Universidad de Antioquia y el ejército dejaron como resultado 40 heridos y 650 universitarios detenidos en el coliseo municipal. Observo las fotos y me sobrecojo viendo los militares dentro de la Universidad.