“El vuelo del Fénix” es un libro con 52 textos escritos por Ave Fénix, un grupo de mujeres de Medellín, víctimas del conflicto armado, que convirtieron la escritura en su método de sanación, de resurgimiento y de construcción de memoria.

Por Elizabeth Otálvaro

Hace alrededor de tres años la organización Ave Fénix tomó vuelo. Escribir para sanar fue entonces la premisa básica de un grupo de ocho mujeres reunidas en talleres de escritura ofrecidos por la Casa de la Memoria de Medellín. Para ese momento, ya algunas de ellas habían hallado en la escritura una terapia a través de la cual tramitar los dolores y las marcas que la guerra les había dejado; pero en el trabajo en equipo encontraron la fuerza que hasta hoy conservan y la idea de que en el ejercicio de escribir no solo está su cura sino también la urgencia de una memoria que había sido silenciada.

Cómo no matarte para de nuevo enamorarme. Cómo no matarte para no matarme. Pero, cómo matarte si no quiero que mueras.

Extracto de «Réquiem», poema de Mary Luz López

“Cuando la escritura es para lucrarte, es escritura muerta. Cuando es para restablecer a los demás, eso es vida, es algo que fluye”, dice Mary Luz López, una de las mujeres fundadoras de la organización. Ella llegó a la escritura por el interés personal de curar el dolor que la desaparición de su esposo, el reclutamiento forzado al que fue sometida y la violencia sexual de la que fue víctima, le dejaron en su cuerpo. Sin embargo, entendió muy pronto que podía liderar un proceso para ayudar a otras mujeres que, como ella, tenían dolores profundos.

Portada del libro "El vuelo del fénix". Foto: Elizabeth Otálvaro

Portada del libro «El vuelo del fénix», que fue presentado en marzo, en Medellín. Foto: Elizabeth Otálvaro

Así fue como después de El refugio del Fénix, el primer libro que resultó de los talleres del 2015, lideró un nuevo proceso junto a su compañera Lina María Palacios. Ave Fénix se convirtió para ellas en la posibilidad de incidir en espacios de ciudad donde su experiencia servía de ejemplo a otras víctimas que iniciaban sus procesos emocionales y de reconciliación, por eso, como bien lo cuenta Mary Luz, era el momento de ayudar a otras a caminar sobre un sendero que ellas ya conocían.

Como parte su participación en el diplomado Gestores de Paz, organizado por la Alcaldía de Medellín, la Unidad para las Víctimas y la Universidad Autónoma Latinoamericana, Lina y Mary Luz emprendieron la tarea de escribir a muchas manos su segundo libro, El vuelo del Fénix. “Es un libro que como el ave al que hace referencia surgió de las cenizas. Cenizas del dolor y la desesperanza, cenizas que sirven para rememorar y reescribir la historia que ha dejado más de cincuenta años de conflicto armado en Colombia”, explica Lina en la introducción del libro que fue presentado en Medellín y que se gestó con el apoyo financiero y técnico del Centro Nacional de Memoria Histórica, USAID, ACDI/VOCA y la Corporación Ayuda Humanitaria. Es, además, el resultado de una serie de ocho talleres en el que participaron 21 mujeres además de las que hacen parte del equipo base de Ave Fénix.

La escritura es vida. Reconocernos como sujetos, salir a la luz, darse a conocer, conocer a otros, transmitir no solo el dolor sino consciencia, abrirle los ojos a las personas, conmover al público; la escritura es sanación, me ha llevado a muchas partes, no solamente a viajar físicamente sino en mi mente, a descubrir que soy persona, que importo y que las palabras las puedo inmortalizar son las palabras.

Mary Luz López

Según María Orfaley Ortíz, docente de piscología de la Universidad de Antioquia, quien actualmente desarrolla la investigación «Efectos políticos de subjetivación en victimas que han participado en procesos de escritura», y quien acompaña el proceso de formación en el que persisten las mujeres de Ave Fénix, ellas hacen un trabajo de estética del dolor, pues han encontrado metáforas para nombrar lo innombrable, incluso –dice la psicóloga y escritora– algunas cargadas de muchísima belleza.