Organizaciones de mujeres buscadoras de personas desaparecidas han expresado su inconformidad ante la demora del Instituto Nacional de Medicina Legal para identificar los restos de sus familiares cuando estos han sido hallados. La institución, por su parte, responde que la identificación es un proceso complejo y difícil que se toma su tiempo.
Las Madres de la Candelaria – Línea Fundadora lanzarán la campaña Mi familia no sabe que fui un falso positivo con el fin de encontrar a las familias de 17 de los cuerpos encontrados en el cementerio de Dabeiba.
Entre el 29 de agosto y el 4 de octubre se realizará el Mes por la Paz “Juntanzas Creadoras de Paz”, en diferentes puntos de Medellín y el área metropolitana.
Madres de la Candelaria se comprometieron a acompañar la búsqueda de los familiares de las personas desaparecidas que han sido halladas e identificadas en el cementerio Las Mercedes de Dabeiba.
La lucha por la búsqueda de los desaparecidos lleva a las víctimas a crear lenguajes y símbolos de memoria que les permiten interpelar el silencio de los otros, convocar a la solidaridad para reducir la indiferencia y renovar vínculos afectivos con los ausentes para nunca desfallecer.
Cuatro mujeres del colectivo Madres de la Candelaria abrieron su corazón para contar episodios de sus vidas que reflejan coraje y valor, cualidades que, aseguran ellas, solo la muerte les quitará.
Para conmemorar dos décadas de búsqueda de personas desaparecidas, la Asociación Caminos de Esperanza – Madres de La Candelaria y el Centro Nacional de Memoria Histórica produjeron el documental “Alargando el tiempo”.
Una investigación de Universidad de Antioquia evidenció que los procesos de reconciliación entre víctimas y victimarios pueden contribuir a disminuir el dolor de las personas, mejorar su bienestar y facilitar los procesos de búsqueda de desaparecidos.
Los actos de reparación simbólica son una forma de resarcir los daños sufridos por las víctimas en medio del conflicto armado, pues no pueden ser reparados materialmente. En Colombia, después de la promulgación de la Ley de Justicia y Paz, este mecanismo se ha extendido, pero en muchos casos queda en entredicho su eficacia restaurativa. Por Esteban Tavera El 24 de agosto de 2014, el Tribunal Superior de Medellín dictó una sentencia en contra del bloque Élmer Cárdenas de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá por el asesinato de once personas en Dabeiba. Tres años después, el pasado 29 de abril, la alcaldía de este municipio del Occidente antioqueño, acatando el fallo del Tribunal, realizó un acto de reparación simbólica a las víctimas de ese grupo armado, con el fin de honrar su memoria y pedirles perdón por la connivencia de la Fuerza Pública con el accionar paramilitar. En la sentencia, la Sala de Justicia y Paz de ese Tribunal condenó a ocho comandantes paramilitares, entre ellos Darío Enrique Vélez Trujillo, alias ‘El Tío’; Bernardo Jesús Díaz Alegre, alias ‘El Burro’; Juan Pablo López Quintero, alias ‘Chimurro’ y Elkin Jorge Castañeda Naranjo, alias ‘Hermógenes Maza’, este último, comandante del […]