La Corporación Cultural Altavista organiza la primera Semana de las Memorias de Altavista, a propósito de la conmemoración de la masacre de 16 jóvenes perpetrada por paramilitares el 29 de junio de 1996. Las actividades culturales, colectivas y académicas se realizan del 22 al 29 de junio en diferentes lugares del corregimiento de Medellín.

Foto: Luis Eduardo Giraldo

Texto: Juliana Builes Aristizábal

La Semana de las Memorias de Altavista busca conversar en torno a las memorias del territorio a través del teatro, los encuentros de la comunidad y el cine. Daniel Baena, fundador de L’atelier actoral, habitante de Altavista y uno de los organizadores de la conmemoración, afirma: “En esta semana se poetizan los vejámenes de la guerra y resignificamos estos hechos, en que los territorios y la comunidad son los protagonistas, lo que permite un escenario de juntanza colectiva y de resistencia comunitaria hacia un territorio que ha sido victimizado por hechos violentos”.  

El líder comunitario y también director de teatro explicó el contexto de los hechos de violencia que marcaron a la comunidad de Altavista. En los años 1995 y 1996 miembros del Ejército y la Policía nacional hacían en el corregimiento de Altavista operaciones de inteligencia, conocidas como «brigadas cívicas», cuyo objetivo principal era la identificación de posibles integrantes de grupos subversivos en la zona.  

El 29 de junio de 1996, un grupo de diez hombres identificados con brazaletes del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación (CTI) se presentaron en la terminal de buses de la comunidad. Su objetivo era interrogar a los pasajeros de un autobús de la ruta 176, quienes fueron obligados a descender y pararse en fila frente al vehículo. 

Tras realizar una verificación en un archivo fotográfico y preguntar por integrantes de las milicias, los agentes estatales les dispararon a los jóvenes, quienes no superaban los 30 años. Este hecho resultó en la muerte de 16 personas, mientras que otras dos resultaron heridas. Después de la masacre, el gobernador de Antioquia en ese entonces, Álvaro Uribe Vélez, dio la orden de militarizar el corregimiento, lo que derivó en una oleada de situaciones victimizantes para sus pobladores.  

En junio del 2022, la conmemoración en Altavista tuvo la primera iniciativa teatral basada en el acontecimiento de la masacre. 1996 fue el nombre de la obra concebida y dirigida por Daniel Baena, que se presentó con lleno total en el teatro Jairo Alberto Valencia de la Corporación Cultural Altavista.  

En este año 2023, los líderes comunitarios y artísticos del corregimiento le apuestan a la sensibilización en torno a la violencia y a la construcción colectiva de memoria, pues esperan que cierta estigmatización de Altavista como lugar de violencia se transforme en asociar el territorio a un espacio de configuración paz, mediante el arte y la cultura. Baena expresa al respecto: “Es la primera Semana de las Memorias en la que hemos creado una frase o lema: ‘Una Grieta en el Silencio’. Y la pregunta que le hacemos a la comunidad es “¿si no contamos esta historia quién la va a contar?”.  Dejamos la pregunta abierta para seguir construyendo tejido social”. 

El martes 22 de junio a las 7:00 p. m. se inauguró en el teatro Jairo Alberto Valencia la Semana de las Memorias. La obra 1996 abrió la programación, que continúa de la siguiente manera: 

  • El viernes 23 de junio, a las 7:00 p. m., en el teatro Jairo Alberto Valencia, se presentará Aquí te espero, Pinocho, una obra de La Parla que retrata el reclutamiento forzado al que fueron sometidos niños y niñas en el conflicto armado en Colombia. 
  • El sábado 24 de junio, a las 7:00 p. m., se proyectará en la Casa de Gobierno de Altavista Develaciones: un canto a los cuatro vientos, una puesta en escena de la Comisión de la Verdad, que cuenta de manera simbólica el conflicto armado en Colombia. 
  • El domingo 25 de junio, a las 11:00 a. m., comenzará el recorrido «Caminando por las Memorias», que parte de la estación del metro Los Alpes y finaliza en la Casa de Gobierno de Altavista, donde se encuentra ubicada la placa en conmemoración de las víctimas de la masacre del 29 de junio de 1996. A las 2:00 p. m., se llevará a cabo el taller «Barro, muralismo y tejidos» en la Casa de Gobierno de Altavista, dirigido por Medellín en la Cabeza. 
  • El lunes 26 de junio, a las 2:00 p. m., se realizará en el teatro Jairo Alberto Valencia, el taller «Aún espero los recuerdos», dirigido por La Tempestad Teatro, además de una lectura dramática de «Donde no llegan los recuerdos», a las 7:00 p. m. en el mismo lugar. 
  • El martes 27 de junio, a las 6:00 p. m., en la Casa Museo Manzanillo, se llevará a cabo la velatón «Recorriendo las Memorias», para reafirmar que en Altavista nunca serán olvidados aquellos que murieron dentro del conflicto. 
  • El miércoles 28 de junio, a las 6:00 p. m., la Casa Museo Otraparte (en Envigado) será el escenario de un conversatorio sobre la obra de teatro 1996, en el que participarán Yaneth Foronda, madre de una víctima de la masacre de Altavista; Helena Salas, integrante del colectivo Mujeres Caminando por la Verdad; Daniel Baena, director de la obra, y Paola Aristizábal, antropóloga y actriz del corregimiento. 
  • El jueves 29 de junio, a las 7:00 p. m., en el teatro Jairo Alberto Valencia, se presentará Floras, una producción del colectivo teatral L’acerArte del municipio de Santuario. La obra pone en escena la violencia sufrida por una niña en medio del conflicto armado, así como la instrumentalización del cuerpo infantil y femenino como botín de guerra. 

En esta semana Altavista se pregunta por los recuerdos que siguen atravesando sus calles, y haciendo un proceso que se espera establecer y continuar año tras año, para no olvidar a los que fueron asesinados, desplazados y atormentados por una guerra que no solo se vivió en la ruralidad del país.