Para el experto en archivística, Ramón Alberch i Fugueras, en Colombia deberían mantener intactos los archivos que contienen información sobre el conflicto armado, porque cualquier documento puede resultar decisivo para esclarecer violaciones a los derechos humanos.
De acuerdo con registros de la Escuela Nacional Sindical, desde 1973 hasta mayo de 2018, se cometieron alrededor de 14.670 violaciones a la vida, la libertad y la integridad contra sindicalistas en el país, de las cuales 3.154 fueron asesinatos. Esta es una de las razones por las que en la actualidad el sindicalismo colombiano demanda su reconocimiento como sujeto colectivo priorizado en el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición.
El avance de las comisiones de la verdad en el esclarecimiento del pasado y sus impactos en la ciudadanía, dependen en buena medida de la posibilidad de acceso a los archivos de la sociedad civil y del Estado, y de las condiciones que tengan las sociedades para seguir interrogando las fuentes recuperadas por estos organismos de investigación.
Para ser agentes de paz, según María Emma Wills, los colombianos debemos hacer memoria histórica y conocer lo que pasó en la guerra. “Promover la paz para las mujeres significa repensarnos como sociedad, hombres y mujeres juntos, para establecer relaciones democráticas”.
“El vuelo del Fénix” es un libro con 52 textos escritos por Ave Fénix, un grupo de mujeres de Medellín, víctimas del conflicto armado, que convirtieron la escritura en su método de sanación, de resurgimiento y de construcción de memoria.
Este año el trabajo del Centro Nacional de Memoria Histórica está enfocado en hacer realidad el sueño de tener, para el primer semestre del 2020, un Museo que se ocupe de honrar a las víctimas del país.
La Dirección de Archivos de Derechos Humanos, del Centro Nacional de Memoria Histórica, tiene la misión de recolectar los archivos de diversos sectores de la sociedad que puedan ayudar a esclarecer hechos ocurridos durante el conflicto armado. César Osorio, asesor pedagógico de dicha dependencia, habló con Hacemos Memoria sobre la importancia que tendrán en el cometido de acercarnos a la verdad.
Medellín, la segunda ciudad más grande de Colombia, es el escenario que desde la década de 1980 ha presenciado la disputa entre diversos actores del conflicto armado colombiano. En el informe Medellín: memorias de una guerra urbana, el Centro Nacional de Memoria Histórica y la Corporación Región reconstruyen los porqués del conflicto armado que enfrentó la ciudad entre 1980 y 2014, a través de un relato colectivo en el que las víctimas son protagonistas.
El director del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), Gonzalo Sánchez, advirtió en la charla inaugural de la Maestría en Ciencia Política, en la seccional Oriente de la Universidad de Antioquia, que el primer año de funcionamiento de la Justicia Especial para la Paz (JEP) y de la Comisión de la Verdad tendrá dificultades, pues su labor será objeto de debate electoral en los comicios del 2018. Además, habló de la importancia que representa el testimonio para la memoria, la historia y la justicia. Por Juan Camilo Castañeda Ante la implementación del Acuerdo de Paz que firmaron el Gobierno y las Farc, el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) enfrenta nuevos retos. Uno de ellos es el de propiciar un diálogo entre las experiencias que ha recogido en una década de trabajo y la labor que cumplirán instancias como la Jurisdicción Especial para la Paz y la Comisión de la Verdad. Gonzalo Sánchez, director del CNMH, reconoce que instituciones como la Comisión de la Verdad cumplirán funciones muy parecidas a las de la organización que dirige: “Al igual que nosotros, ellos van a escuchar a las comunidades, y pondrán en la esfera pública esas voces, eso es bueno porque el […]
Según el informe “Medellín: memorias de una guerra urbana”, 132.529 personas fueron reconocidas como víctimas directas del conflicto armado en la ciudad entre 1980 y 2014, una cifra que permite dimensionar la confrontación entre guerrillas, milicias urbanas, paramilitares y fuerzas estatales en la capital antioqueña. Episodios como las operaciones militares Otoño, Antorcha, Contrafuego, Mariscal, Potestad y la emblemática Orión, en la Comuna 13 de Medellín, donde se hizo evidente para el país la confrontación entre el Ejército, grupos paramilitares, milicias y guerrillas de las Farc y Eln, le han permitido afirmar a distintos grupos de académicos que, sobre todo en la parte final de la década de 1990 y los primeros años de la del 2000, uno de los capítulos más álgidos de la guerra colombiana se vivió en Medellín. El último informe de memoria publicado por el Centro Nacional de Memoria Histórica y la Corporación Región se ocupa precisamente de esa “urbanización de la guerra” y, por lo tanto, hace referencia a las violencias políticas desplegadas por las guerrillas, los paramilitares y las Fuerzas Armadas en la ciudad. Los investigadores de la Corporación Región, de la Universidad de Antioquia y de la Universidad Eafit –encargados de desarrollar el informe–, […]