Liberto Antonio Pineda Godoy murió en combate el 31 de julio de 2001. Aunque fue identificado por la Fiscalía, su cuerpo fue enterrado en una fosa a campo abierto en la vereda La Inmaculada de Alejandría, Antioquia.
Foto: archivo judicial
El 31 de julio de 2001, guerrilleros de las Farc y paramilitares del Bloque Metro se enfrentaron durante dieciséis horas en la vereda La Inmaculada, de Alejandría, a unos ciento nueve kilómetros de Medellín.
Cinco días después del combate, el 5 y 6 de agosto, un grupo liderado por la Fiscalía General de la Nación llegó a la zona y realizó la inspección judicial a diecisiete cadáveres de guerrilleros que quedaron abandonados a campo abierto. En la inspección identificaron uno de los cuerpos como el de Liberto Antonio Pineda Godoy. Sin embargo, cavaron una fosa y lo enterraron en el lugar.
En 2021, conocimos un documento de 34 páginas en el que quedó registrado el procedimiento judicial. Durante seis meses analizamos ese y otros expedientes del caso que sumaron 1.616 folios, escuchamos 48 testimonios de testigos directos, revisamos notas periodísticas, videos y audios, para tratar de entender por qué la Fiscalía no volvió por los cuerpos, descubrir quiénes eran los otros guerrilleros que murieron en el combate y si alguien, en algún lugar de Colombia, seguía buscando a Liberto.
El reportaje Liberto: un nombre desaparecido en combate responde algunas de esas preguntas y además evidencia la inacción del Estado frente a la búsqueda de las personas muertas en hostilidades, la soledad de las familias de los combatientes desaparecidos y los daños irreparables que sufren las comunidades que ven convertidas su parcelas en cementerios.
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