El documental Mujeres valientes, de la comunicadora social Jéssica Vargas, reúne testimonios de cuatro mujeres que, a pesar de ser víctimas del conflicto, son un ejemplo de inspiración para superar el dolor.

Por: Adrián Atehortúa
Foto: archivo particular

Una larga exploración en temas de memoria histórica, violencia y equidad de género llevaron a Jéssica Vargas a enfocar sus trabajos en la carrera de Comunicación Social, en la Universidad Javeriana, hacia la reivindicación de las mujeres que fueron golpeadas de alguna manera por el conflicto armado en Colombia.

Como madres, como combatientes, como lideresas, como activistas… la periodista encontró que la lista de formas en las que las mujeres son victimizadas es de no acabar. Sin embargo, para encontrar una nueva mirada a lo que sería su tesis de grado, se inclinó por escuchar las voces de aquellas que transformaron el dolor en una fuerza para superar la violencia.

Ese es el camino que muestra el documental Mujeres valientes, producto final de su tesis que, dos años después de egresada, se estrenó oficialmente en octubre de 2019. La pieza audiovisual hace un paneo por las memorias, vidas y logros de cuatro mujeres colombianas, muy distintas entre ellas si así se le quiere mirar, que han tenido que vérselas con el conflicto armado de Colombia. Pero, además, los casos que relata son un ejemplo de formas en las que cada una de sus protagonistas encontró una salida diferente a la venganza o la violencia.

Presentadas con el respeto que requieren estos casos, dándoles a cada una la misma importancia y una completa libertad que se siente muy necesaria para un ejercicio periodístico como este, el espectador conoce una sobre otra, yendo y viniendo, a Lucero Carmona, Yolanda Perea, Pastora Mira y Valentina Beltrán, quienes cuentan con su propia voz todas sus vivencias, conocimientos, visiones, sentimientos y reflexiones.

La historia de Pastora Mira, lideresa del Oriente antioqueño, fue incluida en el documental «Mujeres valientes». Foto: archivo particular.

Lucero Carmona encontró en el teatro una forma de reivindicar su vida y la memoria de su hijo, asesinado extrajudicialmente por el Estado. Yolanda Perea llegó a Medellín de su Riosucio natal y en esa ciudad comenzó un largo camino de activismo en contra de la violencia sexual de la que ella fuera víctima a los 11 años. Pastora Mira es hoy una de las lideresas más importantes de San Carlos (Antioquia) en la reconstrucción del tejido social del Oriente Antioqueño, después de una serie de sucesos en los que la violencia de diferentes bandos le arrebataron gran parte de su familia. Valentina Beltrán hoy es madre, fue candidata a la alcaldía de Icononzo (Tolima) por el partido FARC tras acogerse al proceso de paz y enfocó sus estudios en pedagogías para ayudar a mujeres afectadas por todo tipo de violencia.

Lejos de ahondar en las heridas o ensañarse con los lados dolorosos de las historias que le confiaron, Jéssica Vargas d