Siglos de despojo del territorio y de violencia por parte del estado, empresarios y caciques locales fueron orillando a la población yoreme a abandonar sus raíces y a dividirse entre pueblos. Esta es la historia de cómo se logró tejer la alianza entre los pueblos de Cohuirimpo y Masiacahui, al norte y al sur de Navojoa en Sonora, México.