A junio de 2020, la Comisión de la Verdad entrevistó a 269 exintegrantes de grupos armados. Su voz, según comisionados, analistas y excombatientes, es necesaria para construir un relato plural sobre la guerra y para dar explicaciones sobre las motivaciones e intereses que había detrás de sus acciones
Por Camilo Castañeda Arboleda
Imagen de portada: mesa de trabajo con excombatientes. Foto: Comisión de la Verdad
Entre noviembre de 2018 y junio de 2020, la Comisión de la Verdad entrevistó 7.450 personas que fueron víctimas o testigos de hechos ocurridos en el conflicto colombiano. Pero además, entrevistó a 269 exintegrantes de grupos armados, cuya versión, según la comisionada Alejandra Miller, también es fundamental para esclarecer la verdad acerca de las diferentes acciones de violencia que ocurrieron en medio de la confrontación.
Miller explicó que el informe final que deberá entregar la Comisión en noviembre de 2021 debe a responder dos preguntas centrales: ¿por qué las acciones atroces que se cometieron? y ¿cuáles eran los intereses detrás? Y las respuestas a estas cuestiones “las tienen, fundamentalmente, los responsables de tales hechos”, afirmó.
Buscando avanzar en este campo, entre febrero y noviembre de 2019 la Comisión de la Verdad, la asociación ABC PAZ y el Centro Internacional de Justicia Transicional (ICTJ) gestionaron la Mesa de Trabajo Narrativas de Excombatientes en la que participaron treinta personas que pertenecieron a las guerrillas de las Farc, el M19, el EPL, el Quintín Lame y la Corriente de Renovación Socialista, así como exintegrantes de distintos bloques paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Acerca de esta experiencia, Álvaro Villarraga, quien participó en la Mesa como exintegrante del EPL, resaltó que en la Mesa hubo un trato respetuoso y destacó los niveles de franqueza que se consiguieron en las sesiones realizadas. Para él, este proceso fue una exploración en la que, a través de preguntas, los excombatientes pudieron dialogar acerca de las razones, circunstancias, actuaciones e impactos que tuvieron sus acciones en medio del conflicto, además pudieron rememorar procesos y vivencias en las distintas agrupaciones.
Según explicó Villarraga, quien en las últimas dos décadas ha liderado procesos de verdad y justicia en espacios como la Dirección de Acuerdos de la Verdad del Centro Nacional de Memoria Histórica, en este ejercicio de la Comisión surgieron “narraciones que muestran circunstancias del país, motivaciones políticas de la insurgencia, las propias de los grupos de paramilitares, reconocimientos de dinámicas del conflicto y de impactos graves que comprometen a los distintos actores, incluyendo a la Fuerza Pública, que no participó en la Mesa”.
Además de los espacios colectivos como esta mesa de trabajo, la Comisión ha realizado entrevistas y recibido aportes de excombatientes de los grupos armados a través de espacios individuales y colectivos. Los exintegrantes de las Farc han sido quienes más versiones han entregado debido a que, según la comisionada Miller, muchos de ellos están organizados en el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, lo que facilita el proceso de convocatoria, mientras que en el caso de otros actores el proceso se dificulta por la dispersión de las personas.
Según un documento interno del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc), consultado por Hacemos Memoria, hasta el 11 de agosto del 2020, exintegrantes del grupo guerrillero han participado en 30 reuniones con la Comisión de la Verdad donde han expuesto sus versiones de lo que sucedió en la guerra. Una de las experiencias más significativas de ese proceso ocurrió entre el 18 y el 19 de febrero del 2020, cuando quienes pertenecieron al Secretariado de las Farc hablaron sobre las causas, orígenes y prolongación de la guerra, la relación de las Farc con la población civil, la política y el funcionamiento y organización interna del grupo guerrillero.
Pastor Alape, delegado de Farc ante el Consejo Nacional de Reincorporación, considera que las versiones que entregan los excombatientes de Farc a la Comisión de la Verdad le permitirán conocer al país conocer “una visión de la realidad guerra, para entrar a desarrollar una política pública que posibilite que nadie más regrese a la violencia”. Alape, además, enfatizó en que “hay que mostrar el contexto de los hechos, sobre todo, para hallar las causas estructurales que generan el conflicto”.
Según Alape, quien también hace parte de Dirección Nacional del Partido Farc, los excombatientes del antiguo grupo insurgente han entregado información sobre financiación, participación de menores en la guerrilla, violencia sexual y hechos concretos como la bomba en el club El Nogal y la masacre de Bojayá. “La Comisión de la Verdad necesita organizar el rompecabezas de qué nos llevó al conflicto y cómo llegamos a su agudización. Para ello se requiere la verdad de los paramilitares, del Estado y la nuestra, de manera que la Comisión pueda coger absolutamente todas las piezas del rompecabezas del drama que nos ha afectado históricamente. La verdad de los responsables no debe tener justificaciones políticas, debe ser una verdad dirigida a entregar la versión clara, que tiene un compromiso político y ético con el fortalecimiento del camino para la construcción de paz”, expresó.
Otra versión del conflicto que ha escuchado la Comisión de la Verdad es la del M19. De hecho, el 14 de mayo del 2020, Vera Grabe, Álvaro Jiménez, Otty Patiño y Darío Villamizar, todos exintegrantes de ese grupo, ofrecieron versiones sobre el papel de esta organización guerrillera en la guerra y algunos hechos puntuales como la toma del Palacio de Justicia o el asesinato el 19 de abril de 1976 de José Raquel Mercado, presidente de la Confederación de Trabajadores de Colombia, hecho sobre el que reconocieron su responsabilidad y que calificaron como un error.
Para Álvaro Jiménez, quien fuera vocero del M19 en las negociaciones de paz entre esta guerrilla y el gobierno de Belisario Betancourt en 1984 y hoy preside la Campaña Colombia Contra las Minas, sus aportes ante la Comisión de la Verdad, a treinta años de la desmovilización de movimiento insurgente, cobran sentido en tanto esta institución del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición tiene el mandato de elaborar un informe que abarque desde la década del cincuenta del siglo pasado. “El M19 fue parte de esos tiempos históricos que se desarrollaron, de tal forma que nuestras versiones sirven al interés de la Comisión por entender algunos de los procesos en los que participamos diversos actores de la sociedad, entre ellos quienes asumimos la insurgencia como conducta en la década del 80”, explicó Jiménez.
Hay críticas por relatos justificadores o heroicos
De acuerdo con Villarraga, un asunto que puede ser problemático para construir un relato de verdad acerca del conflicto, es que algunos excombatientes, especialmente los que pertenecieron a grupos paramilitares, aun sostienen discursos justificadores sobre las violencias que cometieron.
Pero la mayor preocupación de Villarraga en el proceso que adelanta la Comisión de la Verdad está relacionada con los aportes que hacen las Fuerzas Militares, sobre quienes advierte son reticentes en el reconocimiento de sus acciones y sostienen un discurso heroico. “Dicen entregar informes a la Comisión, pero están enfocados en denunciar acciones de las guerrillas, en especial de las Farc. No he escuchado sobre un solo informe en el que las Fuerzas Militares digan que van a entregar un reconocimiento de las violaciones a los derechos humanos que los comprometen”, argumentó.
A esto se sumó la advertencia que hizo Álvaro Jiménez quien expresó que este proceso no puede reducirse a escuchar las versiones de las personas que participaron en la guerrilla, sino que “tiene que valorar también la participación y la escucha de personas que hicieron parte de las Fuerzas Armadas, de personas que tomaron decisiones políticas desde el Estado y de personas que tomaron decisiones económicas, pues la construcción de verdad debe involucrar a todos los componentes y actores que han participado de ella”.
Acerca de estos asuntos, la comisionada Miller reconoció que en las entrevistas a excombatientes los funcionarios de la Comisión se han enfrentado a relatos heroicos, pero explicó que ante esa situación, profundizan en los hechos y realizan contra preguntas con base en información recopilada de las víctimas y de informes que han recibido de diversas organizaciones. De esa manera, la institución ha logrado que los exintegrantes de grupos armados ofrezcan información valiosa para el esclarecimiento de la verdad. “Hemos tenido, por ejemplo, muchas entrevistas con mandos medios y altos que han durado hasta dieciséis horas, en ellas logramos preguntar por su mirada contextual, pero también por hechos concretos y particulares. Creo que ahí se ha logrado profundizar, cuando se logran esas entrevistas en profundidad no es posible que todas sus respuestas apunten a relatos justificadores o heroicos”, explicó la comisionada.
La comisionada Miller, también afirmó que históricamente en el país todos los actores armados han tenido sectores que niegan sus responsabilidades en la guerra. De ahí que el desafío de un informe de esclarecimiento de la verdad sea ayudar a que quienes tienen responsabilidades reconozcan sus acciones: “si hay algo que un informe de la verdad debe aportar a tumbar ese negacionismo, cuando logremos eso es que se pueden desatar procesos de reconocimiento de responsabilidades más profundos”, señaló.
En ese sentido, la comisionada Miller explicó que el esclarecimiento de la verdad del conflicto armado es solo una de las actividades por las cuales la Comisión de la Verdad trabaja con excombatientes, pues otro de los objetivos de este trabajo es adelantar procesos de reconocimiento de responsabilidades que permitan la dignificación de las víctimas y que a largo plazo ayuden a edificar un horizonte de reconciliación y convivencia en el país.
“El informe final de la Comisión puede ayudar a socavar el negacionismo”: Alejandra Miller
La comisionada de la verdad, Alejandra Miller, sostiene que un informe de verdad no asegura la reconciliación, pero puede ser un aporte para que exintegrantes de grupos armados reconozcan sus responsabilidades. Leer entrevista.
“La verdad no puede transigir con el horror”: Álvaro Villarraga
Para el exintegrante del M19, un relato de verdad sobre el conflicto armado, que sirva para ampliar la democracia y construir paz, requiere, además de las versiones de las insurgencias, el reconocimiento de las responsabilidades que le competen al Estado. Leer entrevista.
“Nos arrepentimos de los límites a los que nos llevó la guerra”: Pastor Alape
Según Pastor Alape, delegado del partido Farc al Consejo Nacional de Reincorporación, el pedido de perdón a las víctimas del secuestro, realizado a través de un comunicado público la semana pasada, hace parte de “un largo proceso de esclarecimiento, reconocimiento de responsabilidad y reconciliación”. Leer entrevista.
“Nadie en una instancia de verdad quiere quedar como un masacrador”: Álvaro Jiménez
Para el exintegrante del M19, un relato de verdad sobre el conflicto armado, que sirva para ampliar la democracia y construir paz, requiere, además de las versiones de las insurgencias, el reconocimiento de las responsabilidades que le competen al Estado. Leer entrevista.
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