El ejército asesinó a un estudiante de Ingeniería durante una protesta

Elkin Eduardo Córdoba Giraldo, estudiante de segundo semestre de Ingeniería Química de la Universidad de Antioquia, fue asesinado por el ejército el 4 de marzo de 1976, cuando marchaba en compañía de otros estudiantes hacia el Centro de Medellín, después de una asamblea regional de universidades. La marcha en la que fue asesinado Elkin Eduardo hacía parte de la serie de movilizaciones que, desde enero de 1976, habían iniciado diferentes universidades de la ciudad en solidaridad con los estudiantes de la Universidad de Medellín, que desde 1975 denunciaron presuntos malos manejos por parte de las directivas de esa institución.

Álvaro Cadavid Marulanda, profesor de la Universidad de Antioquia, recuerda que las movilizaciones estudiantiles en la Universidad de Medellín iniciaron porque el entonces rector de esa institución, Orión Álvarez Atehortúa, vendió varios buses de esa universidad, en los que transportaban sin costo a algunos estudiantes, desde el Centro de la ciudad hasta el campus universitario. Después, agregó Cadavid, el rector contrató el servicio con terceros y empezó a cobrar el pasaje a los alumnos, sin que la comunidad universitaria conociera cuál había sido el destino del dinero generado con la venta de los buses.

A las protestas de los estudiantes de esa institución se sumaron luego organizaciones estudiantiles de las universidades de Antioquia y Nacional. Posteriormente se unieron también estudiantes de la Universidad Pontificia Bolivariana y del Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid. Según Bernardo Calderón, entonces profesor de cátedra de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Medellín y quien ahora es jubilado de una empresa privada, la reacción de las directivas de esa universidad fue expulsar a algunos estudiantes que participaban activamente de las movilizaciones.

Sobre la marcha en la que fue asesinado Elkin Eduardo, el periodista Reinaldo Spitaletta, quien en aquel entonces estudiaba Música en la Universidad de Antioquia y en la actualidad es profesor de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Pontificia Bolivariana, relata: “Cuando estábamos cercanos a la Facultad de Medicina, escuchamos detonaciones. Recuerdo los disparos de fusil y el rumor de que habían asesinado a un estudiante”.

Elkin Eduardo recibió un impacto de bala en la cabeza. Fue llevado a la Policlínica y allí murió pocas horas después. Según un artículo publicado el 5 de marzo de 1976 en El Colombiano, titulado “Muerto un estudiante en graves disturbios”, cinco estudiantes y doce miembros de la fuerza pública quedaron heridos; además, 99 personas fueron capturadas por la policía y el ejército. Y posteriormente, por orden del entonces gobernador de Antioquia, Óscar Montoya, la Universidad fue militarizada.

El mismo día de esa publicación, el Consejo Directivo de la Universidad de Antioquia, luego de una reunión extraordinaria, emitió un comunicado en el que lamentó no haberse pronunciado antes, y rechazó el accionar de las directivas de la Universidad de Medellín, la muerte de Elkin Eduardo y las declaraciones oficiales en las que calificaron el asesinato como un accidente, cuando “de parte del señor gobernador han mediado tantas amenazas y tan enfáticas y descompuestas expresiones sobre la universidad […] particularmente al referirse a las formas cómo [sic] enfrentaría el conflicto”, señala el comunicado, que reposa como documento anexo en el acta del Consejo Directivo número 1987 del 5 de marzo de 1976.

Según Álvaro Gaviria Ortiz, entonces decano de la Facultad de Ingeniería y docente de la Universidad, “el gobernador del departamento tenía mucha distancia con respecto a la Universidad, a veces en situaciones públicas decía que había que entrar arrasando, dando garrote, era una situación tensa”.

Entre tanto, ese mismo 5 de marzo se realizó en Bogotá una reunión del Consejo Nacional de Seguridad, que fue presidida por el Ministerio de Gobierno e integrada además por el Ministerio de Defensa, el DAS y el comandante de las Fuerzas Armadas, general Luis Carlos Camacho Leyva. A la reunión asistieron como invitados el ministro de Educación, Hernando Durán Dussan; el gobernador de Antioquia, Óscar Montoya Montoya; el alcalde de Medellín, Víctor Cárdenas Jaramillo; y los rectores de la Universidad de Medellín, la Universidad Pontificia Bolivariana, la Universidad Nacional y la Universidad de Antioquia, además del vicerrector de la Universidad Nacional Sede Medellín.

El informe sobre esa reunión, entregado al Consejo Directivo de la Universidad de Antioquia por el rector Bernardo Trujillo Calle, está registrado en el acta 1988 del 8 de marzo de 1976, según la cual el directivo informó que fue citado a Bogotá con el fin de ofrecer alguna solución antes de que el Consejo Nacional de Seguridad tomara una medida extrema sobre la Universidad. De acuerdo con el relato del rector Trujillo, parte de los presentes en esa reunión coincidieron en la posibilidad de que la Universidad de Antioquia fuera clausurada en caso de que se presentaran nuevas confrontaciones. La misma amenaza de clausura la recibieron la Universidad Nacional y la Universidad de Medellín.

En esa reunión del Consejo Directivo, en la que el rector presentó su informe, el representante de los estudiantes León Ovidio Medina solicitó autorización para fijar una placa conmemorativa con el nombre de Elkin Eduardo Córdoba. Dos días después, estudiantes y profesores se reunieron en el Teatro Camilo Torres de la Universidad para descubrir dicha placa. Además, un grupo de estudiantes y profesores decidió hacer un entierro simbólico en la iglesia Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en Buenos Aires, barrio donde vivía Elkin Eduardo. Sin embargo, los asistentes a ese acto fueron dispersados por la policía, y más de 70 personas, entre profesores y estudiantes, fueron detenidas y luego liberadas, según informó El Colombiano en un artículo del 10 de marzo de 1976, titulado “Fracasó el proyectado ‘entierro simbólico’”.

Para conjurar la crisis universitaria, el 17 de marzo de 1976 el Consejo Directivo de la Universidad de Antioquia acordó recibir a los estudiantes expulsados de la Universidad de Medellín a causa de las movilizaciones. Fue así como el 22 de marzo la Asamblea General de Estudiantes de la Universidad de Antioquia levantó el paro que había declarado y normalizó las actividades académicas.

Actas consultadas

50 AÑOS DE VIOLENCIA Y RESISTENCIA
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