Indígenas y empresarios no se ponen de acuerdo en la manera de cómo deben resolver el litigio por predios que unos consideran ancestrales y otros, posesiones respaldadas legalmente. Documentos antiguos revelan que esas disputas tienen sus raíces en la época de la Colonia Española. Los nativos insisten en continuar con la recuperación de la Madre Tierra.