En 2014 la Universidad del Atlántico demandó su inclusión en el Registro Único de Víctimas por las afectaciones que sufrió la comunidad universitaria entre 1996 y 2008 a causa de la injerencia del paramilitarismo. En julio de 2015 la institución recibió la resolución de la Unidad de Víctimas que la reconoció como sujeto de reparación colectiva. Actualmente su Comité de Impulso se encuentra en la fase de diagnóstico del daño y espera que el Plan Integral de Reparación Colectiva sea aprobado a finales de 2018.