A un año del rodaje de Días y noches entre guerra y paz, el director de cine Uli Stelzner regresó a Granada, Antioquia, y a su corregimiento Santa Ana para proyectar este documental que narra las memorias de la guerra que vivió este municipio del Oriente antioqueño y muestra la movilización social y política que desató el resultado del plebiscito del 2 de octubre del 2016. El realizador conversó con los asistentes sobre su película y sobre la construcción de paz en Colombia.

Por Juan Camilo Arboleda
Fotografías: Esteban Tavera

El 14 y 15 de octubre se proyectó en la Casa de la Cultura de Granada, Antioquia, y en el parque principal del corregimiento de Santa Ana, de este mismo municipio, el documental Días y noches entre guerra y paz, una película independiente del director alemán Uli Stelzner que motivó reflexiones sobre la construcción de paz en Colombia.

La película registra el viaje del documentalista por el país entre septiembre y noviembre de 2016. Un período marcado por la polarización de los colombianos ante la firma del Acuerdo de Paz entre el Gobierno y las Farc, el triunfo del No en el plebiscito que pretendía legitimar lo pactado en La Habana y la movilización social que desató este resultado.

En ese viaje, Stelzner vivió la jornada del plebiscito en el corregimiento de Santa Ana y allí se cruzó con los que considera son los personajes más carismáticos de su película: Roberto Giraldo y Gilberto Guerra, dos campesinos que cuentan cómo los afectó la guerra entre las guerrillas, los paramilitares y las fuerzas armadas del Estado, y a los que el triunfo del No les frustró, de momento, la esperanza de ponerle fin a la guerra entre el Estado colombiano y las Farc.

Gilberto Guerra es uno de los protagonistas del documental Días y noches entre guerra y paz del cineasta Uli Stelzner.

Para Stelzner, la difusión del cine independiente en Latinoamérica, región donde ha grabado casi todas sus películas, es difícil por las lógicas comerciales de las empresas privadas que atienden este negocio; además, asegura que es mucho más complejo llegar a lugares alejados como Santa Ana: “Para mí es muy gratificante este tipo de funciones al aire libre, porque la gente se junta para ver una película e incluso se ve reflejada”, comentó.

Stelzner, por principios éticos, regresa a los lugares donde graba sus documentales para que los protagonistas y sus vecinos vean las historias que cuenta; sobre todo, tratándose de temas sensibles como el conflicto armado y la paz de un país: “Estas proyecciones representan una satisfacción muy grande para todos; en especial; para Gilberto y Roberto, pues sus relatos han impactado a todos los públicos que han visto la película”.

Ángela Valenzuela, comunicadora de la Fundación Heinrich Böll, organización que junto a la Deutsche Welle Akademie financió las proyecciones, dijo que este tipo de documentales muestran un punto de vista y una información que los medios masivos de comunicación no le ofrecen a la comunidad. “La fundación que represento apoya este tipo de proyecciones porque es importante que las personas, en este caso los habitantes de Santa Ana y Granada, vean el producto en el que participaron, y sientan que en las ciudades no somos indiferentes a las realidades que vivieron los campesinos. Quedamos muy satisfechos porque los comentarios fueron muy buenos. Muchos estaban conmovidos y agradecidos porque llegamos hasta acá y le mostramos al país su historia”, dijo Valenzuela.

Los habitantes de Santa Ana vieron el documental en la plaza principal del corregimiento.

Edy Yazmín Giraldo Aristizábal, granadina que estudia Comunicación Social-Periodismo en la Universidad Eafit, viajó el fin de semana a Granada para ver la película: “En el Salón del Nunca Más recordamos lo que fue para nosotros la guerra, pero con estas nuevas narrativas también podemos entender cómo estamos construyendo la paz. Es una invitación a dejar los odios y avanzar un poco más hacia esa paz que queremos”.

Francis García, habitante de Granada, percibió en el documental la mirada excepcional de un alemán que, ante las experiencias de las guerras del siglo XX en su país, busca historias sobre comunidades que anhelan la paz. A García le resultó interesante apreciar, a través del lente de Stelzner, los acontecimientos de la etapa final de la negociación del Acuerdo de Paz en diferentes lugares del país: desde el sur, en los Llanos del Yarí, hasta Santa Ana en el Oriente antioqueño: “Nos muestra una visión de lo que significa para los campesinos la paz y nos permite entendernos a nosotros mismos”.

Tras la conversación que sostuvo con los asistentes a la película, Stelzner quedó satisfecho con la proyección de Días y noches entre guerra y paz en este municipio que ha sido escenario de guerra y paz: “Los granadinos vieron en este ese material un aporte para conocer y entender mejor su país”.